LEGADO A. GARCÍA FAJARDO

DONACIÓN DE TRES PIEZAS MEXICANAS RELACIONADAS CON HERNÁN CORTÉS 

        A principios de junio de este año (2023), contactó telefónicamente con nosotros D. Antonio García Fajardo, cortesiano de pro, que ha viajado a México en varias ocasiones y que ha realizado en más de una ocasión la ruta que hiciera Cortés y su hueste Cortés hace 500 años, desde Veracruz camino de Tenochtitlan.

     Aunque nuestro contacto virtual se remonta a más de una década, fue en el Congreso Internacional Hernán Cortés en el siglo XXI, que celebramos en Medellín-Trujillo, en abril de 2019, cuanto tuve el placer conocer y saludarlo personalmente, y desde entonces seguimos mantenemos una fluida comunicación virtual. En el mismo Congreso nos prometió que su completísima biblioteca cortesiana, con más de doscientos volúmenes sobre el ilustre metelinense, tiene intención legársela a nuestra Asociación Histórica.

      En el contacto del pasado mes de junio nos anunció una sorprendente noticia: nos enviaría, en breve, un trozo del ahuehuete donde, según la tradición, lloró Hernán Cortés en la Noche Triste (30 de junio al 1 de julio de 1520, hace exactamente 503 años). Y la promesa no se hizo esperar: el pasado 26 de junio, nos llegó por mensajería un estuche-expositor de metacrilato con las siguientes objetos²:

• Trozo de madera quemada del ahuehuete¹ donde lloró Hernán Cortés, que el donante asimila a  una ceiba (árbol sagrado de los mayas). En la plaquita descriptiva reza el siguiente texto:

"TROZO DE LA ACEIBA

DONDE CORTÉS LLORÓ LA NOCHE TRISTE 

30-VI-1520"

• Un trozo de madera y un trozo de un ladrillo de la Casa de Cortés en la Villa Rica de la Vera Cruz (La Antigua), que ya estaba muy deteriorada y semiabandonada, cuando el donante la visitó. En la placa descriptiva aparece:

"MADERA Y LADRILLO CASA CORTÉS

EN VILLA RICA DE LA VERACRUZ 

(30-VI-1520)". 

       Para la AHM es un honor y una gran satisfacción recibir este regalo, que viene a enriquecer nuestros fondos archivísticos en permanente ampliación y en proceso de registro y catalogación. 

           Por nuestra parte, deseamos manifestar desde aquí a D. Antonio García Fajardo nuestro más profundo agradecimiento por esta generosa donación -ya lo hemos hecho de forma privada, y lo reiteraremos formalmente desde la Asociación-. La AHM corresponderá creando en nuestro archivo el LEGADO ANTONIO GARCÍA FAJARDO. 

  1. El ahuehuete de la Noche Triste sufrió un incendio por un corto circuito en el cableado de la zona -para otros en un acto vandálico-, el 10 de enero de 1980. Aunque han transcurrido 503 años desde ese suceso, conviene recordar que el ahuehuete, es un árbol considerado sagrado y místico para los nativos. Este histórico ahuehuete se encuentra ubicado sobre la Calzada México-Tacuba en la colonia Tacuba de la delegación Miguel Hidalgo en la Ciudad de México.

      Aunque este árbol ha estado ahí durante cientos de años, recientemente tomó gran importancia para los capitalinos de México D.F., debido a que esta especie fue elegida para reemplazar la icónica palma de la glorieta Reforma de la CDMX. Esta decisión fue tomada por los ciudadanos capitalinos. Según dio a conocer la jefa de de la CDMX, Claudia Sheinbaum, quien dijo que en la consulta participaron más de 200 mil personas que dio como ganador al ahuehuete.

     En cualquier caso, al llegar Andrés Manuel López Obrador al Gobierno de México en 2018, la política cultural y educativa se ha enfocado en reivindicar a los grupos minoritarios, ofrecer perdón a grupos no hegemónicos que fueron violentados y denigrados, a reinterpretar los hechos históricos, rescatar del olvido a personajes históricos, en particular a las mujeres. Esta misma política la ha replicado el Gobierno de la Ciudad de México. En consecuencia el árbol de la Noche Triste, y la plaza donde se encuentra, dejó de llamarse así el 26 de julio de 1521, y pasó a denominarse el arbol/plaza de la Noche Victoriosa.

     Saber más del "árbol de la Noche Triste": https://dovane63.blogspot.com/2018/06/ahuehuete.html 

2. El autor nos ha manifestado telefónicamente la autenticidad de sendas piezas, recogidas personalmente por él en uno de sus viajes.

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